Ley De Dependencia

Muy buenas bloggeros, en esta entrada semanal os vengo a hablar acerca de un tema que está un poco oculto en la sociedad y del que tenemos poca información o desconocemos lo que ocurre con él en la sociedad, el tema de hoy es: Ley de Dependencia.

La Ley de Dependencia es una ley que se instauró en España el 14 de Diciembre de 2006, la cual se aplica a personas que por razones de edad, enfermedad o discapacidad son dependientes de sus familias de forma permanente, la persona no dispone de las cualidades físicas, mentales o sensoriales para poder llevar una vida digna por sí sola. Esta ley establece diferentes grados de dependencia, los cuales son:

  • Grado I. Dependencia moderada. Cuando la persona requiere de alguien de forma temporal, al menos una vez al día.
  • Grado II. Dependencia severa. Cuando la persona necesita ayuda dos o tres veces al día, sin necesidad de dispones del apoyo permanente de un cuidador.
  • Grado III. Gran dependencia. Cuando la persona necesita de un cuidador las 24 horas del día.
Gráfica de prestaciones de 2007 para dependientes en distintos grados:



Entendido todo lo anterior, cuando se pone en práctica en la vida cotidiana comienzan a aparecer graves problemas que nos afectan seriamente.

Uno de los problemas que acontece en cuanto a las personas mayores, es que no hay suficientes centros de residencia para acoger a estas personas, por lo tanto nos encontramos en 2018 con una lista de espera de 240.000 personas, al rededor de 400.000 personas beneficiadas por esta ley y 94.000 en centros de día.

Otro problema que le sucede y que quizás sea el más grande, es que debido a la falta de fondos en las arcas públicas, las administraciones públicas no tienen medios económicos para pagar a tantas personas las prestaciones por los cuidados en el entorno familiar, lo que provoca un abandono de las familias y una frustración para esas personas dependientes. La falta de fondos ha traído recortes (legales, debido a que al crear esta ley no se incluyó en la ley sanitaria) en prestaciones y un ejemplo de ello es el de Carmen Albillo, una señora de Valladolid de la cual su marido es dependiente de grado III, cobraba 380 euros al mes de la ayuda y tras la modificación de esta ley en 2015 le rebajaron a 31 euros al mes, aparte de rechazarle peticiones de rampas de acceso a la comunidad para poder entrar a su propia casa con su marido. Aquí os dejo el enlace, explica todas las vivencias ocurridas en la entrevista que le hicieron: Carmen Albillo

En sanidad también está presente el recorte, pero de una manera más indirecta, puesto que se establece un "copago" que consiste en que las personas que tengan una renta superior a 532 euros al mes deberán pagarse sus propios medicamentos, lo que hace que las personas con pocos recursos pero con rentas más altas de 532 euros se vean en apuros económicos, puesto que estos medicamentos, la asistencia, materiales necesarios como: grúas, elevadores y demás son muy caros y no están al alcance de todas las personas.

Luego por otro lado encontramos que los partidos políticos dejan este tema un poco apartado, sin darles importancia, puesto que para ellos estas personas no aportan nada a la sociedad y no teniendo bastante con esto, utilizan este tema para beneficiarse en las elecciones creando falsas promesas. Un ejemplo es que el gobierno de Rajoy expulsó a gente de la lista de espera para obtener los méritos de que se había reducido el número de personas de dicha lista para este sector como el mismo había prometido hacer anteriormente. Pero hoy en día se sigue manipulando a estas personas en casos como por ejemplo: a ciertos individuos que tienen el grado III de repente se les adjudica el grado I, porque supuestamente han mejorado, para poder ahorrarse ese dinero y tener más, más margen de tiempo para tratar a otras personas.

La SAAD en una organización que se encarga de denunciar, defender, proponer, y seguir la gestión económica y social acerca de este colectivo, siempre ayudándolos, mejorando los servicios sociales y las áreas de la vida cotidiana. También expone datos como: 30.000 dependientes murieron en 2018 sin haber recibido los servicios reconocidos por la ley, haciéndonos ver el gran problema que existe en nuestra sociedad y que permanece oculto, en lo referente a este tema.

Como solución a estos problemas, muchas organizaciones y asociaciones piden que la inversión en este sector aumente el PIB de un 0,54% al 2% puesto que así se podrían crear más residencias y habría fondos económicos para esta ley. Lo podéis leer en la siguiente noticia de El País.
Y en mi opinión lo que debería hacer el Estado es algo parecido, invertir en la Ley De Dependencia puesto que es una gran idea e iniciativa, ya que generaría puestos de empleo y la mayoría del dinero invertido regresaría otra vez al Estado en forma de impuestos como: IRPF, IVA, Seguridad Social, etc.

Para finalizar, tenemos que ser humanos y mirar al lado, ya que hay muchas familias que lo están pasando muy mal, gastándose todos sus ahorros, dejando su trabajo de lado para poder cuidar de sus familiares dependientes, sin recibir ningún tipo de ayuda u orientación, ni nadie que les aconseje como cuidar de ellos o simplemente como poder hacer el día a día más ameno.
Porque nadie es inmune a este fenómeno y en cualquier momento de la vida uno mismo se puede ver en una situación de dependencia o en caso de no padecerla podemos vernos implicados en dicha situación por parte de un amigo o familiar.
Además esta es una lucha de todos puesto que en este problema nos vemos involucrados, todos llegaremos a la etapa de la vejez en algún momento de nuestras vidas, que está relacionada con la dependencia y por lo tanto nos llegará a afectar en un futuro de manera inevitable.














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